"También ríen en los charcos los inmundos renacuajos cuando rozan el plumaje de algún cóndor que cayó"

sábado, 31 de mayo de 2014

Jaque al Cine III

Así como ya habíamos enfrentado a Jaque al asesino vs. Enbusca de Bobby Fischer, y también La Defensa de Luzhin vs La Diagonal del Loco; la partida de hoy es un viejo clásico de clásicos. Se cruzan dos películas claves del género cinematográfico y a la vez grandes representantes del juego de ajedrez.


Para no andar con muchas vueltas diremos que hay un claro vencedor y film candidato a jugar la final del mundo contra alguna otra película del género, esta es “El Séptimo Sello” de Ingmar Bergman. 
La otra, “La Fiebre del Ajedrez” (el título original en ruso es Shakhmatnaya Goryachka) no se queda atrás pero es tan solo un cortometraje que sirvió de propaganda a la Unión Soviética. Es una película muda de 1925 dirigida por Vsevolod Pudovkin, con guión de Nicolai Shpikovsky. Una de las primeras filmaciones sobre el juego de ajedrez y para analizarla hay que tener en cuenta la situación política y social rusa de entonces. Luego de la Revolución y con la Unión Soviética afianzada, el Torneo de Ajedrez en Moscú de 1925 (y este film) fueron un aparato de propaganda hacia el resto del planeta, ya que a éste asistieron los mejores jugadores de la época del mundo: el cubano Capablanca, el mexicano Carlos Torres, el yanqui Marshall, el austríaco Spielman, el checo Reti, el británico Yates; y no sé si hubo metida de uña o no, pero el campeón fue nada más y nada menos que el ruso Efim Bogoljubow, la mejor propaganda que el régimen bolchevique podían tener. Todo un éxito.
En resumen, este cortometraje nos muestra la popularidad del juego en ese país y la locura que desataba la celebración el torneo allí. Si bien es sencillo se destaca el montaje perfecto para la época y sobretodo el humor alocado sobre un tema que podía haber sido tomado muy en serio. Constantemente se muestra la locura del pueblo ruso por este deporte, y cómo los jugadores eran considerados estrellas, algo así como hoy pueden serlo jugadores de fútbol o actores de cine.
En el medio de una situación sentimental en que su mujer no soporta su obsesión por el juego, el personaje principal interpretado por Vladimir Fogel, estará lleno de dramatismo, humor y desenfreno. Suele jugar contra sí mismo, usa unas medias a cuadros negros y blancos, por momentos tendrá intentos de suicidio, y por otros saltos de clavadista hacia la nieve luego de ser expulsado de algún auto. El ajedrez es su vida, y en la calle lo encuentra en todos lados, sobre un carro, en pañuelos, en los diarios o en las baldosas de los edificios, hay una partida entre un policía y un ladrón e incluso a los transeúntes les llueve tableros de ajedrez. La confusión de un farmacéutico es casi el jaque de la película.
En cuanto a lo técnico tiene imágenes sorprendentes para la época, tomas en contrapicada donde se muestra solo partes del tablero y el movimiento de la pieza.
Aunque tiene un gran peor actor, el mismísimo Capablanca que aún siendo cubano en la Rusia de ese momento era considerado como un Beatle en EEUU en 1964. Capablanca tiene un papel sobre el final casi como un super héroe que viene a salvar al mundo, pero mientras se desarrolla la escena llena de dramatismo mirará a cámara casi como preguntándole al director si lo está haciendo bien (¿habrán repetido varias veces la escena o esta así como salió quedó?), lo que se dice: un genio.


Ahora si hablemos de “El Séptimo Sello”. Realizada en 1957 por Ingmar Bergman está basada en una obra teatral que el mismo director había escrito y titulado “Pintura sobre Tabla”. Había sido representada varias veces en teatros y en transmisiones radiales. Incluso había sido dirigida por Beng Ekerot, quien en el film tendrá el gran papel de la Muerte. Por eso el film está lleno de planeos y situaciones que parecieran remitir a una obra de teatro.
Es un clásico del cine y ayudó a Bergman a establecerse como uno de los directores más renombrados y contiene escenas icónicas y que han sido parodiadas y homenajeadas innumerable cantidad de veces. En su autobiografía Bergman habla sobre las dificultades con las que se topó para poder filmarla, tanto de salud y estados de ánimo como las dificultades económicas con las que se topó para producirla y por las cuales tuvo que reescribir el guión varias veces. El título hace referencia a un pasaje bíblico del Apocalipsis que se relatará al principio y al final del film.
Todas las escenas se filmaron en los interiores de un estudio de grabación, a excepción de las escenas del comienzo y del final que fueron filmadas en una pendiente rocosa de la playa de Escania. El blanco y negro acentúa las escenas impactantes de contrastes de luz y sombra, que recuerdan imágenes del expresionismo alemán, donde la sensibilidad de la Edad Media se representa en su mayor crudeza. Como curiosidad hay que decir que Bergman tuvo la idea del film a partir de pinturas medievales, en especial del pintor de iglesias medievales Albertus Pictor (o Alberto el Pintor), que además de aparecer en la película, vendría siendo una alegoría de lo que también estaba haciendo en ese momento Bergman, ya que lo que se verá en las pinturas aparecerá retratado en el film. Algo así como cuando Velazquez se pintó a si mismo dentro de la escena de Las Meninas. 

Y así es interesante analizar cómo el Ser Humano a lo largo de la Historia fue transitando diferentes miedos, en la era medieval se le temía tanto a la idea de la peste como en la época de la filmación se le temía a la idea de una guerra atómica, de la cual, para algunos, sólo Dios podía salvar al hombre.
La idea de Religión, Muerte, la Nada y el Amor cruzarán la película en forma constante y por momentos la pantalla se teñirá con escenas de humor negro muy interesantes para cortar con tanta seria erudición. Una película existencialista, densa y con diálogos complejos y dignos de los grandes teólogos o filósofos que se plantean el sentido de la vida, la necesidad de certeza, la Nada, la Muerte y el por qué del silencio de Dios.

Está ambientada en la Europa medieval, en la época de las cruzadas religiosas. Relata la historia de Antonius Block (Max Von Sydow) un caballero cruzado que está volviendo junto con un escudero a su pueblo natal en Suecia durante la época de la peste negra y que en su viaje de regreso es perseguido por La Muerte, el caballero le propone jugar una partida de ajedrez para así ganar tiempo y poder realizar algún acto que de sentido a su vida. En el camino encuentran a un grupo de cómicos ambulantes que tienen como principales actores justamente a una pareja llamados María y José. Éste último sufre alucinaciones del tipo religioso y cree ver constantemente a la Virgen. En el camino también encontrarán a una muchacha condenada a la hoguera por creerla bruja y motivo de las pestes que azotan la región. El escéptico filósofo y escudero, llamado Jöns (Gunnar Björnstrand) se verá inmiscuido en varias situaciones por su descreimiento de la fiebre religiosa, y salvará a una joven de una vejación, sumándola a la procesión que regresa a Suecia hacia un castillo en donde estarán a salvo de la peste. Jöns encarna el escepticismo crudo, vendría correspondiendo lo que Sancho Panza era para el Quijote, aunque en este caso mucho más mordaz y tajante en su descreimiento. En el camino también cruzarán una oscura y triste procesión de religiosos flagelándose y sufriendo para que su Dios termine con la peste. Se les unirá también un herrero que ha sido engañado por su esposa con uno de los cómicos. Este ecléctico grupo continuará su viaje y serán estos los personajes que le den otro aire al film, con algo de comedia, situaciones inocentes y más relajadas.

En todo el film La Partida de Ajedrez jugará un papel tangencial (lamentablemente no se mostrarán jugadas ni se jugará demasiado) pero importantísimo para la idea que completa el film, lo que dure el juego será la prórroga que tendrá Antonius antes de que la Muerte se lo lleve. Se sabe que el juego viajó a Europa proveniente de las Cruzadas y que de allí provienen los nombres de las piezas (alfil es “elefante” en árabe) y de las jugadas. Pero los Cruzados no solo llevaban consigo un simple juego, sino una tradición religiosa, filosófica y que encierra grandes secretos. Y todo esto lo muestra Bergman en su film.
En todo este camino La Muerte aparecerá para terminar con la partida. Por más que Antonius intenta engañarla, como es de suponer ella logrará su cometido. Aunque el final es todo suyo, digo, del que no la haya visto y quiera verla, acá el resumen de apariciones del juego.

Sólo diremos que en su biografía Bergman, hablando de los problemas económicos para filmarla, dice de la penúltima toma: “La imagen de la Danza macabra bajo el cielo nublado se logró a un ritmo frenético ya que la mayoría de los actores habían dado por terminado su día de labores. Asistentes, electricistas, un encargado del maquillaje y alrededor de dos pasantes de verano, los cuales ni siquiera sabían de que se trataba todo esto, tuvieron que interpretar el papel de los condenados. Una cámara sin sonido filmó la toma antes de que las nubes se disiparan".

El film Gran Maestro de esta oportunidad se encuentra completo en youtube incluso con excelente subtitulado castellano. JLO, un Amigo de la Casa, creador y mantenedor de Cuando el Arte Ataque ya lo había recomendado en un comentario en este blog. Síganle la corriente y veanla, no tiene desperdicio.

domingo, 11 de mayo de 2014

Mi Pasión por Legião II (Dois)

Hablaremos hoy del segundo disco de la mejor banda brasilera. Fue titulado “Dois” no sólo por ser el segundo que editaron sino también por la intención, descartada finalmente, de que sea un álbum doble que iba a llamarse “Mitología e intuición”. A los copados de la discográfica no le hizo mucha gracia que el disco tuviera gran cantidad de canciones -¡y menos que fueran dos!- por lo que muchas quedaron fuera (algunas serían editadas en su tercer álbum), dando como resultado este popular y exitoso disco de 12 canciones; y que, subiéndome al tren del éxito, es también mi preferido.
Con este disco la banda alcanza sus mayores ventas y a la vez se afianza en cuanto a su sonido. Se alejan un poco del  post punk de Londres que habían desarrollado en su primer álbum y comienzan a pisar el terreno de lo que será el sonido típico de Legião Urbana de ahí en más, esa mezcla de rock and roll con ganchos folk y una pizca de bossa y otra de blues. La banda estaba conformada por Renato Russo en voz y guitarra rítmica, Dado Villa-Lobos en guitarra principal, Marcelo Bonfá en batería y Renato Rocha en bajo, quién grabaría el tercer álbum con la banda para luego abandonarla. La tapa nos muestra la misma austeridad que el disco blanco de los Beatles (aquel que es disco doble), y se parece más a una cubierta de libro.

 El gran salto de este disco lo da Renato Russo como poeta, a partir de acá sus letras van a ser las verdaderas protagonistas. Dejará numerosas metáforas, alegorías y alusiones a hechos históricos, y claro, como el nombre de la banda lo indica, por lo general se ocupará de temas metropolitanos, de cuestiones que atañen a las grandes ciudades pero que, acompañadas de este nuevo sonido hará de esta banda única en Brasil (recordemos que no es el sonido característico del país a los ojos del resto del Mundo, para quienes Brasil significa samba, bossanova o el estilo de rock de Paralamas).
El disco fue lanzado a mediados de 1986 y abre con una radio mal sintonizada donde la música de Legião se mezcla con algunos pasajes de la Internacional Socialista. Inmediatamente se da paso al primer tema del disco “Daniel na cova dos leões” (Daniel en la cueva de los leones). El tema hace referencia a una relación sexual (y probablemente a la homosexualidad de Renato, esa que a mediados de los ochenta era todavía difícil de aceptar y que debía tratar en forma discreta). El tema trata sensaciones de afecto, complicidad, incertidumbre, placeres y aceptaciones, y las relaciona con un pasaje bíblico del Antiguo Testamento: “Daniel en la Fosa de los Leones”, aquel que, temeroso de Dios y leal súbdito del Rey Darío es engañado y condenado por traición y por ello, arrojado a la fosa de los leones. Entre Dios y estas bestias muertas de hambre serán quienes definan su destino, comérselo vivo o no, algo así como una ordalía (por más que insistan no les voy a contar el final). Más de uno notará la pinta de pastor evangélico o de maestro divertido de catequesis que tenía Renato y no le sorprenderá que se ocupe de temas bíblicos, pero las palabras que usa no bajan línea directa, sus letras son siempre una metáfora, un poema de algo cotidiano.

En las propias palabras de Renato “el tema habla de alguien que está acorralado y tiene que demostrar algo”, como tener que lidiar con una sexualidad que no es aceptada. En las frases finales nos dirá que a pesar de que hay un camino fácil muchas veces optamos por el difícil.
Hago nuestro tu secreto más sincero

y desafío el instinto disonante
La inseguridad no me ataca cuando me equivoco
Y tu momento se convierte en mi instante
y tu temor de tener miedo a tener miedo
No hace de mi boca una confusión
tu cuerpo es mi espejo y en ti navego
y sé que tu corriente no tiene dirección.

Pero tan cierto como el error de ser barco a motor

E insistir en usar los remos,
es el daño que el agua hace cuando uno se ahoga
y el salvavidas no está allá, porque no lo vemos.

El segundo tema es “Quase Sem Querer” (Casi sin querer). Una canción que si se la escucha con atención Quase no necesita traducción, tiene un estribillo simple “Ya no me preocupo si no se por qué / a veces lo que veo casi nadie ve / y se que vos sabés / casi sin querer / que veo lo mismo que vos ves” y por momentos tiene frases tan bien construidas que lo hacen un tema muy interesante “Cuantas chances desperdicié / cuando lo que más quería / era probarle a todo el mundo / que yo no necesitaba / probar nada a nadie”. El ritmo comandado por la variedad de guitarras será típico en la banda a partir de este disco y de este tema. Este video no es oficial de la banda, está hecho por un fanático.
El tercero es un tema que por el ritmo podía haber formado la lista de temas del primer álbum, el bajo toma protagonismo como no lo hará en todo este disco aunque las texturas y capas de diferentes guitarras aparecerán y desaparecerán a lo largo del tema. El título en inglés “Acrilic on Canvas” (Acrílico sobre tela) da pie para un tema que usa como alegoría el trabajo de hacer una pintura para referirse a una relación amorosa. La canción está repleta de frases como “Te trabajé en luz y sombra”, “hice pinceles con tus cabellos”, “Preparé mi tela con pedazos de sábanas que no llegamos a ensuciar”, “el marco lo hice con madera de la ventana de tu cuarto” o “con las lágrimas que no jugaron con vos destilé aceite de lino”.
El cuarto tema es “Eduardo e Mónica”. Sin muchos prolegómenos diré que es uno de los temas más famosos de Legião. Relata la vida de una pareja común y corriente a lo largo de los años, con el estilo bossa-folk que caracterizaba a Renato en su etapa de trovador anterior a formar Legião. Es casi una improvisación, pero luego de escucharlo varias veces es imposible modificarle alguna parte de la letra, ¡hasta creo que puedo cantar en portugués!
E os dois se encontravam todo dia

E a vontade crescia, como tinha de ser


Una empresa telefónica brasilera hizo un video para una publicidad con este tema conmemorando el aniversario 25 de la canción, y supieron aprovechar la letra e introducir el asunto de las comunicaciones telefónicas. Lo bueno es que tiene una excelente traducción al español, al mismo tiempo que la letra se ve fielmente reflejada en imágenes. Así que los dejo en buenas manos.

 Antes de uno de los grandes éxitos de la banda hay una pausa instrumental a modo de oasis dentro del disco, titulada “Central do Brasil” que hace referencia a la estación central ferroviaria de Rio de Janeiro. Y de ahí nomás tomamos carrera para saltar con “Tempo Perdido”. El tema más rockero del disco, y que fue referencia para un film que salió hace poco en Brasil sobre la vida de Renato Russo (“Somos tan Jóvenes”). Es un clásico del rock brasilero, con frases para que la cante cualquier torcida o para hacer pogo en cualquier parte del planeta. Tiene un video oficial y por suerte está perfectamente traducido. El video nos muestra una TV con rockeros y personajes famosos en plena juventud, el divino tesoro. Imiten el inicio y suban el volumen que este es, sin dudas, el himno de la banda:

En "Metropole" nos ponemos un poco más oscuros y punks. Tema que tratará la injusticia, la violencia, represión, la locura de vivir en las ciudades donde las “órdenes son órdenes”, la sangre no es mertiolate, los accidentes serán satisfechos por televisión y es difícil andar sin documentos. No por casualidad el tema termina con la guitarra distorsionada, el bajo a pleno y la batería el palo. Prosigue "Plantas embaixo do Aquario" que es otro de los que podía haber formado parte del primer álbum. Así como “Soldados” o el tema “O Reggae”, en el estribillo nos pide a gritos que ¡no dejemos empezar la guerra!.
La improvisación de Renato y todo el blues aparecen con "Musica Urbana 2". Otro de los que se entiende perfecto y que parece una zapada, pero que hoy en día no se le puede cambiar un verso de lugar. “No hay mentira ni verdades aquí, sólo hay Música Urbana”. Casi como si la banda se definiría a sí misma, todo a cargo del trovador, el señor Renato Russo y del fan que hizo este video.
La letra de "Andrea Doria" retrata dos jóvenes que pierden la fe en cambiar algo, el mundo quizás. Nos hablará del fracaso, de lo imposible de hacer milagros y de la tristeza de aceptarlo o la terquedad de no aceptar algo. El tema habla también de la falsedad, del mundo de la hipocresía y de que siempre se esconde algo pero que a la vez siempre se tiene un dejo de esperanza. Pero lo más interesante y llamativo para analizarlo es el título. Andrea Doria ¿Quién es o fue Andrea Doria? Bueno, fue un navegante italiano del Siglo XVI. Si nos quedamos con eso pareciera no haber conexión, pero hete aquí que también se bautizó así a un transatlántico que se hundió frente a las costas de EEUU en la década del cincuenta y creo que a este hundimiento hace referencia el tema. De todos los barcos italianos de la época el Andrea Doria era el más caro, seguro y lujoso, era el orgullo del país que intentaba recuperarse después de la Segunda Guerra Mundial. Al igual que el Titanic se hundió por un error humano (chocó con un barco sueco) aunque en este caso la gran mayoría de los pasajeros se salvaron, falleciendo 51 personas. Entonces, tomando en cuenta el título en este sentido la canción nos estaría hablando de un naufragio, de una ilusión que se viene a pique. Renato la canta casi susurrando y sus propios coros son suaves, casi como dichos al oído, la canción apenas se va sale de ese ritmo pero hacia sobre el final se irá hundiendo muy de a poco... de a poco... poco. Cierra por todos lados.
El tema "Fábrica" es el primero que escuché de Legião, gracias a la gran versión punkrock, mucho más veloz y sin teclados que hizo Attaque 77 y que está traducida al español en forma perfecta. La de Legião nos prepara para el final del disco. Trata del mundo obrero en las ciudades modernas, de todos esos que tienen el cielo color ceniza y que sólo quieren justicia y trabajar en paz. Tema para dedicar el 1ero de mayo, ¿hay algo más urbano que esto?.
"Indios" cierra este discazo. El tema, traducido o no, se deja entender. Colonización, barbarie, el “quisiera al menos una vez” como frase que encabeza cada estrofa y un Dios que queda triste al ritmo hipnótico de las guitarras (y con vendavales de fondo), la defensa de una tierra Latinoamericana devastada que quedó sufriendo todo lo que pasó y que ocurre desde hace cinco siglos. Acá va traducido.


Este fue "Dois", a mi entender, el mejor disco de la banda. Volveré pronto con la tercer entrega de esta Pasión llamada Legião Urbana, y que ninguna barrera idiomática podrá frenar.
URBANA LEGIO OMNIA VINCIT.

sábado, 3 de mayo de 2014

Plagio di Plagio III (el Nirvana de los Brujos)

Los Artic Monkeys le afanaron un tema a Nirvana sin saber que estaban afanando a su vez a una banda de los suburbios del mundo. La canción Potion Approaching lanzada en el disco Humbug de 2009 tiene el riff y ciertos pasajes muy parecidos al tema que Nirvana sacó en el disco In Utero de 1993 y que lo titularon Very Ape.

Acá va el de los Artic subtitulado al español.

Antes del abucheo general tengo que tranquilizar a mis amigos fanáticos de Nirvana y aclarar que sin duda fue la banda de los noventa y hasta la llegada del siglo XXI no tuvieron sombra, claramente fue la única que marcó un antes y un después en la forma de sonar de todas las bandas de la época, a pesar de su corta vida. Pero también fueron fieles a la moda de cada tanto “cambiar las cosas de lugar sin pedir permiso”. Very ape es una canción de casi dos minutos, la séptima del disco In Utero y se dice que fue la última que se escribió para este álbum (y éste es un detalle no menor).

Hay una segunda versión grabada en los studios BMG Ariola de Río de Janeiro que es apenas diferente

Pero vayamos sobre el punto que nos interesa para ver de dónde nace la suspicacia. Nirvana tocó en el Estadio Amalfitani  (la cancha de Velez) el 30 de octubre de 1992. No fue un buen show, en parte debido al mal comportamiento del público local y en parte a la mala onda de Kurt. Es que antes de Nirvana tocaron las Calamity Jane, las “ahijadas” de Courtney Love, y no sonaron muy bien o no era lo que la gente esperaba o simplemente por diversión una lluvia de comida, pilas y encendedores caía sobre ellas en pleno show. Las teloneras no pudieron seguir y Cobain en repudio por este hecho decidió no tocar el mayor éxito de la banda y el que todo el mundo esperaba: “Smell like teen spirit”. Amagó la intro un par de veces y cuando los fans empezaban a emocionarse, cortaba y arrancaba otro tema. Esto lo explicó al día siguiente en la única nota formal que dio para la prensa argentina, a Sergio Marchi. El 2 de noviembre Nirvana abandonaba la ciudad pero, Kurt no se iría con las manos vacías.

Aquella noche los teloneros locales que precedieron a las Calamity fueron Los Brujos. La banda de Turdera se encontraba en auge y revolucionaban con su alocada puesta en escena, en 1991 habían grabado su primer disco llamado Fin de semana salvaje y tenían un gran éxito, ese que cuando niños imitábamos el ritmo de la batería golpeando de manera alternada las manos y el pupitre. Oh casualidad esa noche lo tocaron. Aquel tema llamado Kanishka hace referencia a un ignoto rey de cachemira, de la dinastía Kushán que gobernó la parte de lo que hoy es la India y las regiones de la actual Pakistán y Afganistán durante el Siglo II d.C y tiene un riff que gana por knock out.
Algunos creen que Kurt escuchó el tema mientras los teloneros actuaban (y puede haberle quedado el riff en la cabeza), pero también se sabe que después del show, el bajista Lee Chi y uno de los cantantes de Los Brujos fueron invitados a pasar al camarín de Cobain y Cía. Dicen que se encontraron en medio de una batalla de carne, literalmente, con paredes llenas de sangre y las Calamity, Courtney, Kurt y sus allegados se arrojaban bolas de carne ensangrentada. Una traductora dijo que a Cobain le había gustado el show de los Brujos, estos le dejaron el disco Fin de semana… y aquí puede estar el gancho para que Kurt lo haya escuchado un año después, en 1993, antes de grabar In Utero.

Antes de grabarlo Kurt registró una versión acústica de un tema parecido, que todavía tenía otro ritmo y otra letra.

Quizás después de escuchar a Los Brujos se le “ocurrió” cómo cerrar el tema, quizás era el riff que faltaba. Los dejo con la única canción que sale airosa en todo este lío.

Antes de que una lluvia de comida, pilas y encendedores caiga sobre mi, les comento a mis amigos nirvaneros que de creerlo conveniente, a continuación tienen el libro de quejas a su disposición.